jueves, 10 de mayo de 2007

Beso en el taxi
















Con sabor a cereza y azúcar quemada
dejas en mis labios,
cuando subo al taxi.
Con el olor a tu piel llego a casa,
después de amarnos
hasta que la alarma de mi celular suena
para indicarme la hora de partida.
Antes de despertar me retienes
y me pides quedarme hasta el amanecer,
me acurruco un poco más,
y el celular vuelve a sonar por segunda vez
después de media hora.



Poco a poco me desperezo
y voy colocando mis prendas
hasta llegar a mis zapatos de ballet,
que luego darán paso a una danza
que me conduce a la puerta.
Es allí donde beso tus labios
y espero llegar a mi cama para terminar de soñar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pues yo no utilizaba el taxi, pero que ricos sientan esos besos de despedida cuando sabes que dentro de poquito no estarás con la piel que adoras cerca, que lindo texto niña beia, me inspiras pasión.