Placeres

El jugar es algo innato en el Ser Humano, y no se necesita de otras personas para aprender cómo se hace, sólo basta con tener noción de diversión y dejar en claro unas cuántas reglas para empezar la marcha. Tampoco se necesita ser niño para volver a disfrutar de los divertidos pasatiempos, pues existen para todas las edades.

Muchos dicen que la vida es cosa seria, y no un juego pero considero que el estar vivo implica tener riegos, diversión, el dejarse llevar por el azar- muchas veces -, las derrotas y el fin del mismo. Según la Real Academia de la Lengua Española, define a juego como “ejercicio recreativo sometido a reglas, y en el cual se gana o se pierde”

Se habla de la adicción a los casinos, a los juegos por Internet, al play station, al poker pero qué tanto se sabe de los juegos sexuales. Hace unas décadas éste tipo de juego era considerado valido sólo para parejas liberales, pero ahora es parte fundamental en una relación sexual antes del coito; es la estimulación placentera que agudiza los sentidos gracias a los creativos juegos como: “profesor y alumna”, “la bandeja de frutas”, “el strip tease”, “verdad o reto”, “sumisión”, “a ciegas”, “la crema chantilly”, “la enfermera”, “esclavo(a) y guardián” entre otros.

Se considera a los juegos sexuales como una herramienta más para que la pareja disfrute plenamente del sexo, y gracias a ellos se descubren sensaciones antes no experimentadas. Ahora imagine no poder ver gracias a una pañoleta de seda que cubre sus ojos, o en el mejor de los casos ya experimentó esa situación, sometido a caricias bien proporcionadas sin tener la menor idea de las habilidades nuevas y poco pudorosas que su acompañante hará en usted; o talvez, con mayor suerte, ser decorado (a) con crema chantilly por una golosa que poco a poco se encargará de dejarlo limpio.

En cualquiera de los casos que quiera estar sometido, o someter a su pareja, se requiere de confianza y comunicación entre ambos y tener en claro que todo juego cuenta con un inicio, desarrollo y final pero la creatividad con que lo planteé es su aporte personal para la mayor diversión.

Tenga en cuenta que todo lo que gusta y se hace en exceso puede llegar a una adicción, pues estos tipos de juegos también registran adictos (as), haciendo pecar de gula a muchos gracias a la crema chantilly, a una bandeja de frutas o a un derretido helado que es inevitable dejar de tocar.